martes, 28 de abril de 2009

¿Qué sigue?

Ya nos habíamos sacudido a televisa, pero con esta “ayudadita” de tres puntos a Indios otra vez nos van a traer de encargo.

Hasta en los foros de internet se rumoreó un “arreglo” para descender a Necaxa, cuestión totalmente falsa, ni que fuéramos San Luis; lo obvio en nuestra Franja es simplemente el calor. El equipo no funciona cuando juega a las 12 del día, bueno; mejor dicho no gana y los segundos tiempos son realmente un suplicio para los jugadores.

Al paso que se lleva seremos entre el 5 y 8 clasificado (deseamos con ansias ser de los primeros cuatro). Pero la directiva y Chelís tienen que rogarle, suplicarle y pagarle si es necesario a la jefa tvazteca para cambiar el horario de los partidos. (porque Marín no va techar el Cuauhtémoc)

La tradición de jugar a las 12 del día en domingo familiar funcionaba cuando no teníamos ni horario de verano ni mucho menos “calentamiento global”; la familia veía o iba al fut y luego a comer al campo o al parque o un restaurant. Pero logísticamente es más sencillo de comprender, NO había alumbrado o salía mucho muy caro el mantenimiento en los estadios. En nuestra corta memoria recordamos críticas al Atlas, único equipo que jugaba los sábados por la noche.

Claro que se tendría que negociar con televisa también para cambiar las transmisiones de Toluca y Pumas, ya que sólo cuando uno de estos equipo juega en domingo es que tv azteca le tiene que restar rating al horario de 12 del día.

Sin embargo ya venimos comprobando y viendo bien entonces que Puebla califique entre el quinto y octavo lugar, por lo que tendría que jugar miércoles en la noche en el Cuauhtémoc el partido de ida, horario en que este torneo como local ha dado los mejores partidos, siempre y cuando las circunstancias no nos den como rivales a los mencionados Toluca o Pumas.

Estamos ávidos y necesitados, urgidos y ansiosos de CELEBRAR a todo lo que dan nuestros sentimientos TODO lo que ha sucedido en este torneo, se “cambió” la historia. No obstante teniendo lo anterior en cuenta, no podremos esperar un buen partido de futbol contra Tecos, dadas las circunstancias climáticas de medio día. (OJO, confiamos en sacar tres puntos como contra San Luis) pero con un rendimiento de juego bajo y desgastante (hasta ratonero lo llamaron en internet).

Pero ya pasó la tormenta “descensora” y el barco sufrió rasguños y encallamientos, pero no se hundió; ya es bronca de otros tres. Todo lo que venga es ganancia sustancial sobre todo para los dueños, ya que tampoco las entradas van a descender y suponemos que un solo partido de liguilla tendrá precios, reventas y reimpresiones al doble o triple.

¿Que sigue?, para no perder la costumbre: Exijamos continuidad.

La “suigenereidad” del Puebla de La Franja ya nos da miedo. Como bien dice Chelís, lo único seguro es que los jugadores ponen todo de su parte (patadas y mentadas incluidas) cada partido.

Pero por otro lado los “directivos” siguen en el plan de sus “inversiones” (embargos, amenazas, periodicazos, preventas) por lo que sabemos que de cualquier domingo a lunes nos podemos quedar sin: “dueño” del equipo, o sin “representante legal”, sin chiquillos administradores, sin técnico (otra ves), sin jugadores (como Cámpora o Vilches), sin estadio (por embargos o clausuras), con goles anulados, sin refuerzos, sin sueldos, sin “incentivos”, sin recontratos, “sin dinero”, sin chamba… sin qué escribir.

Pero aclaramos, sentimos y vemos ya de otra manera lo que pase o tenga que pasar; la angustia, el temor, y los nervios (y encabronamientos) que teníamos cruzados en nuestra mente y corazón han sido deahogados (insisto, no celebrados) y vivimos el “relax”, la calma luego de la tormenta, la paz, la güeva. (es más, ya ni fuimos al estadio).

La estafeta se la aventamos y con fuerza a Necaxa, Indios y Tigres. Las populares encuestas desean que sean los hijos menores de televisa los que dejen de existir (porque suponemos que si descienden los venden y les cambian nombre). Pero particularmente es más el “morbo” de ver lo que hará el poder televisivo de la dueña que al ver sus intereses y dinero hacerce chiquito moverán cielo, mar, tierra, reglamentos, reuniones de dueños y descensos.

Quince fechas después, 34 partidos más; ya pueden llegar los incentivos, los abrazos, los recontratos, pero no los conformismos.

René Avendaño Villafuerte
paraqueatuvuelta@hotmail.com

No hay comentarios: